El Objetivo de Desarrollo Sostenible 11 de la Agenda 2030 enuncia de forma clara y concisa: “Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles”. Este enunciado, así como los propios valores de la iniciativa Nueva Bauhaus de la Comisión Europea, son las líneas que marcan la filosofía y el ‘quehacer’ del proyecto Elders, que, traducido del inglés, significa personas mayores.
Este es un trabajo que nace en el seno del Instituto Europeo de Innovación y Tecnología (EIT) de la comunidad Nueva Bauhaus Europea, concretamente en su área Urban Mobility que, desde 2019, con su sede en Barcelona, ayuda a los entornos construidos a resolver sus desafíos en términos de transporte y planificación urbana.
Su desarrollo sobre el terreno, sin embargo, no habría sido posible sin la colaboración de CARNET, cooperativa especializada en movilidad, y financiada tanto por la Unión Europea como por el Departamento de Empresa y Conocimiento de la Generalitat de Cataluña; el IACC o Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña; y el Ayuntamiento de Masquefa.
Se llevó a cabo entre febrero y diciembre del año pasado, tiempo durante el que se buscó potenciar el bienestar físico, mental y social de las personas mayores mediante la promoción de la movilidad activa y su participación en el diseño de los espacios públicos, de forma que estos fueran más amables y accesibles para este colectivo. Pero, ¿en qué ha consistido?
El proyecto ha incluido varias fases, entre las que se pueden citar las siguientes acciones:
- Talleres comunitarios para identificar rutas accesibles en el municipio de Masquefa.
- Test y evaluaciones prácticas de dichas rutas en walking tours, en los que se pudieran identificar tanto los obstáculos como los elementos que sí generan comodidad y accesibilidad.
- Talleres de co-diseño intergeneracionales. En ellos, mayores y jóvenes estudiantes del IACC pudieron crear mobiliario urbano adaptado y elegir en qué zonas su instalación sería más apropiada.
- Instalación del mobiliario urbano resultante y pruebas finales para valorar la mejora de la experiencia caminando, y su influencia en la frecuencia y duración de los paseos, así como en la satisfacción de los vecinos.
En total se involucraron 89 personas mayores que han reconocido mejoras en sus rutas de paseo en el municipio catalán, lo que ha generado en los profesionales esperanzas de que esta metodología pueda inspirar otras iniciativas en el resto de Europa.
De hecho, en el mes de junio de este año, el Ayuntamiento de Masquefa participó en la jornada sobre buenas prácticas en proyectos europeos de carácter urbano Policies and Practices for Successful NEB Implementation: Learnings from Local Stakeholders, celebrada en Bruselas. En ella, Lenny Abreu, concejala de Bienestar Social, compartió espacio con miembros de la Agencia de Desarrollo Regional del Noreste de Rumanía y del Programa de Investigación e Innovación ERRIN.