Fuente de inspiración, identidad y cohesión social. Estos son algunos de los atributos más utilizados para referirse al patrimonio cultural, un actor silencioso pero constantemente presente en el transcurso de la vida en los entornos construidos.
Los proyectos patrimoniales son considerados piezas esenciales para la Comisión Europea en la implementación de la filosofía de la Nueva Bauhaus, que pone el foco no solo en la sostenibilidad, sino también en la inclusión, la calidad y la belleza.
Estos valores están cada vez más arraigados en el sector de la cultura. Y es que la NEB entiende el patrimonio desde un enfoque integrado, sostenible y centrado en las personas, que son sus “propietarias simbólicas”. Esta interpretación se aleja, desde luego, de la visión puramente conservacionista.
Esta perspectiva la vemos reflejada en las categorías de los Europa Nostra Awards, que entrega cada año la federación internacional encargada de velar y difundir la riqueza histórica. En la edición de 2025, la Puerta de Alcalá, en Madrid, ha tenido un papel protagonista, pues ha concluido una restauración, que es ejemplo de buenas prácticas en los aspectos arquitectónicos técnicos, pero también en lo que se refiere a la interpretación y la divulgación educativa.
“Abierto por restauración” es la iniciativa del Ayuntamiento de Madrid permitió, desde 2023, conocer en directo el estudio y tratamiento de las patologías y daños que sufría el proyecto, construido en el siglo XVIII por el arquitecto e ingeniero de la Casa Real de Carlos III, Francisco Sabatini.
La conservación de esta muestra de Patrimonio de la Humanidad, incluida en la lista de la UNESCO, ha sido posible gracias a la combinación de la artesanía tradicional y el análisis científico contemporáneo, lo que, de acuerdo con Europa Nostra, cofinanciada por el programa Europa Creativa de la Unión Europea, ha establecido “nuevos estándares de transparencia, investigación y participación pública”.
Este arco del triunfo, que forma parte del conjunto Paisaje de la Luz, ha sido reconocido en la categoría ‘Conservación y Restauración Adaptativa’. Actualmente, su estructura permanece consolidada, de acuerdo con sus materiales y técnicas de construcción originales, como morteros de cal y herramientas manuales; y las humedades que le dañaron han sido eliminadas.
El cuidado en el trabajo desarrollado por más de 100 especialistas, entre ingenieros, herreros, canteros, escultores y conservadores, así como su compromiso con las labores de difusión y pedagogía arquitectónica, sitúan a la Puerta de Alcalá como un modelo de referencia para otros proyectos similares en el resto de Europa.
Sin duda, sus características apuntan a una implicación con los principios de la NEB, que defiende la importancia de la memoria viva, que fomenta el orgullo comunitario, y que valora las soluciones creativas que regeneran el presente con saberes tradicionales.